¿Y SI LLUEVE?
La lluvia es una de las inclemencias meteorológicas más típicas de Santiago de Compostela, especialmente en determinados períodos del año. Por ese motivo, conviene estar preparado y plantear alternativas al mal tiempo para culminar la peregrinación de forma satisfactoria.
Nadie niega que el agua es necesaria y que, además, aporta siempre un toque nostálgico y medio romántico a las calles de una hermosa ciudad. Adoquines humedecidos, perfume empapado de historia y rincones extraviados escondidos por una cortina intermitente. Pero, tampoco se puede obviar que obstaculiza ciertas actividades y crea alguna que otra dificultad.
Sin embargo, no tiene por qué constituir una barrera insalvable para disfrutar del momento álgido de todo peregrino. Santiago es un lugar emblemático con un amplio abanico de posibilidades para disfrutar al máximo. Una enorme oferta cultural y un casco antiguo coronado por una majestuosa catedral, forman parte de las propuestas de entretenimiento compostelano.
Una vez que alcanzada la meta y cumplidos los rituales del peregrino, hay que organizar cómo ocupar el tiempo de estancia en la capital gallega. Se puede, por ejemplo, recorrer la ciudad bajo el abrigo de pórticos y galerías, comenzando por la Plaza de Galicia en dirección a la Praza do Toural. Aunque los itinerarios pueden ser muchos. Basta dejarse llevar por el instinto y por la protección de los porches.
Otra opción es conocer las exposiciones y galerías de los distintos Museos de la ciudad. Un entretenido y estimulante modo de explorar su realidad cultural sin tener que mojarse. El Museo Eugenio Granell, el Museo de la Fundación la Caixa, el Museo de las Peregrinaciones o el Centro Galego de Arte Contemporáneo son algunos de los espacios que harán las delicias de cualquier peregrino con inquietudes artísticas. Y, por supuesto, los teatros y salas de música pueden ser elecciones amenas y divertidas donde toparse con escenarios henchidos de talento que hagan olvidar el paso de las horas.
Las rutas gastronómicas son, por otro lado, otra alternativa de gran atractivo para quienes aman descubrir los platos típicos y tradicionales de cada rincón. Lugares icónicos como la Plaza de Abastos ofrecen productos de gran sabor y arraigo pero son muchos los locales especializados en comida regional que pueden complacer los paladares más exigentes.
En definitiva, no faltan actividades con las que disfrutar de Santiago de Compostela independientemente de los caprichos de la meteorología. Una hermosa ciudad que permite coronar las interminables jornadas de peregrinación con rebosante ocio y entretenimiento cultural. Y, que llueva, no es problema.
Fuentes: pilgrim.es/ espanafascinante/cuatrocantones Imagen: Pixabay
